Cambio en el campo de batalla: El mundo en vez de Sudamérica
Supermercadistas
Cambio en el campo de batalla: El mundo en vez de Sudamérica
Desde hace meses veníamos sabiendo de la tentativa de fusión entre Pão de Açúcar (PDA, mayor retailer brasilero y que pertenece a la Companhia Brasileira de Distribuição) y Carrefour en Brasil. Eran señas de un mercado que continuaría consolidándose al alero de una potente economía. Todo comenzó con un rumor que luego se consolidó con la aprobación de Carrefour: accedía a unir sus activos a los de CBD (Companhia Brasileira de Distribuição) para formar una nueva organización que sería el primer operador del mercado con una facturación cercana a los US $ 20.919 millones.
Previo a esto, la batalla estaba desatada desde el anuncio de Abilio Diniz, presidente ejecutivo y dueño del 32,7% de CBD, de que contaba con el apoyo del Banco Nacional de Desenvolvimento Econômico e Social (BNDES) y el banco BTG Pactual para concretar la fusión con el gigante francés. Frente a esto Casino (también francés y rival de Carrefour), socio de Diniz y dueño del 36,9% de PDA, alegó deslealtad, contraatacó elevando su participación a un 43,1% y negó su aval para la operación. Como saldo, las entidades gubernamentales quitaron su apoyo financiero y Diniz salió a buscar apoyo en socios privados para llevar a cabo una fusión que finalmente fracasó.
En mi opinión, lo que el empresario brasilero calificaba como un acuerdo que beneficiaría a todos, se relaciona más bien con su afán de lograr participación a nivel mundial. Es una clara señal de que la pelea regional entre las compañías de retail ya es historia: Ahora el campo de competencia es global. Esta tesis quedó demostrada cuando Diniz condicionó la venta de Pão de Açúcar a que Carrefour le cediera el control del 11,7% de sus acciones a nivel mundial.
En momentos en que Europa y EE.UU. atraviesan una cierta recesión, Diniz está negociando justo en el momento apropiado, aprovechando el enorme crecimiento de Brasil y la expansión de su potencial. Estamos frente al inicio de una importante fase de consolidación de los principales grupos de supermercadistas a nivel mundial: Cada vez habrá menos grupos de retailers compitiendo por la participación global.
Los pasos a seguir probablemente se traduzcan en una aceleración de las estrategias de concentración y expansión a nivel regional y mundial. Walmart ya se adelantó: Ahora que se descartó la tentativa de PDA, manifestó su interés en adquirir la filial brasilera de Carrefour, a lo que el gran francés contestó negativamente. Pasará poco tiempo antes de que estas compañías muevan sus fichas impulsando la consolidación de este rubro, que en Chile ya alcanzó su máximo nivel a un 80% de concentración con la entrada de Walmart y SMU.
Una última reflexión: El rol que han tenido las fiscalías económicas de cada país en particular ha sido crucial en las limitaciones de fusiones y adquisiciones. Un ejemplo de esto fue la compra de Alvi y Construmart por parte de SMU, siendo éste uno de los pocos actores autorizados del país, y donde jugó a favor la poca participación de mercado de Saieh en esos rubros. En Brasil, estos estamentos también han protagonizado un papel preponderante en no emitir mayor concentración entre supermercadistas. Sin embargo y según la tendencia, si la competencia es cada vez más regional o mundial, ¿tiene sentido que el rol de estas instituciones esté supeditado sólo a la jurisprudencia de cada país?